Un sueño hecho realidad - Por Beatriz Moreno Amador
Mi primer artículo, realizado junto a otrxs investigadorxs en Psicología, ha sido publicado en la revista de referencia para los Trastornos relacionados con el TOC (Journal of Obsessive-Compulsive and Related Disorders).
Este estudio consiste en evaluar/estudiar si unas escalas/cuestionarios son válidas/útiles para preguntar sobre 4 trastornos en adolescentes: TRICOTILOMANÍA, DERMATILOMANÍA, TRASTORNO DE ACUMULACIÓN y TRASTORNO DISMÓRFICO CORPORAL. Los resultados nos indican que sí lo son y por tanto, podemos usar las escalas para preguntar a adolescentes sobre los mencionados trastornos.
Éste es un primer paso fundamental para acercarnos a la realidad de las personas que viven con estos síntomas y ayudar a quien lo necesita. Y ahora tú leyendo esto también nos estarás ayudando, porque la información promueve el respeto y la aceptación ante lo desconocido.
¿Por qué esto era un sueño?
Cuando tenía siete años pensaba que era la única persona en el mundo que quitaba los pelos de sus pestañas y de otras partes de su cuerpo sin motivo. Esa ignorancia me acompañó hasta los 15 años, cuando descubrí que lo que me pasaba tenía un nombre de trastorno: Tricotilomanía, y que por tanto podía pedir ayuda. Lo que sucedió cuando pedí ayuda es que no encontré a nadie que conociera bien sobre lo que me sucedía, entonces tuve que empezar a buscar información, y pronto me di cuenta que casi no había nada en castellano y que apenas se investiga sobre ello en países hispanoparlantes. Encontré a toda una comunidad de personas que viven/vivimos en silencio y que necesitan/necesitamos ayuda.
Durante la adolescencia y buena parte de mi juventud me he preguntado insistentemente:
<< ¿A cuántas personas de mi alrededor les pasa esto?>> Soñaba con conocer a otras personas con trico, con saber que no estaba sola.
Cuando tenía siete años pensaba que era la única persona en el mundo que quitaba los pelos de sus pestañas y de otras partes de su cuerpo sin motivo. Esa ignorancia me acompañó hasta los 15 años, cuando descubrí que lo que me pasaba tenía un nombre de trastorno: Tricotilomanía, y que por tanto podía pedir ayuda. Lo que sucedió cuando pedí ayuda es que no encontré a nadie que conociera bien sobre lo que me sucedía, entonces tuve que empezar a buscar información, y pronto me di cuenta que casi no había nada en castellano y que apenas se investiga sobre ello en países hispanoparlantes. Encontré a toda una comunidad de personas que viven/vivimos en silencio y que necesitan/necesitamos ayuda.
Durante la adolescencia y buena parte de mi juventud me he preguntado insistentemente:
<< ¿A cuántas personas de mi alrededor les pasa esto?>> Soñaba con conocer a otras personas con trico, con saber que no estaba sola.
La tricotilomanía se vive en silencio, con mucha vergüenza y una gran sensación de culpa. Por eso es difícil conocerla y hacerla comprensible para quienes no viven con ella. Pero conocerla puede ayudar a muchas personas. A mí me ayudó.
Era horrible tener que ocultarla, y hablar de ella también era horrible porque nadie a mi alrededor lo entendía. Entonces me di cuenta que si quería que me entendieran, que me respetaran, tenía que informar sobre lo que me pasaba, hablar sobre la tricotilomanía.
Un día fue demasiado fuerte el dolor que me hacía sentir, no podía evitar tener tricotilomanía, pero vivir con tricotilomanía era una pesadilla. Fue como tocar hondo, muy, muy hondo y decirme a mí misma: <<hasta aquí has llegado, ahora solo te queda subir porque ya no hay nada más abajo. Tú única opción es hacer de tu pesadilla un sueño>>. Y eso hice, me propuse responder mis preguntas, darle una utilidad a todo lo que había vivido con trico y lo que estaba aprendiendo gracias a mis estudios en psicología. Como persona con tricotilomanía y psicóloga mi objetivo último es aliviar en lo posible el sufrimiento que causa convivir con algunos síntomas, disminuir el silencio y secretismo que envuelve a los trastornos psicológicos, anular la vergüenza y la humillación, mías y de otras personas.
Este estudio nos ha permitido acercarnos a adolescentes y preguntarles sobre cosas que es muy probable que nadie les haya preguntado antes; que estas preguntas les hayan permitido hacerse más conscientes sobre cosas que les pasan y que experimentan internamente, posiblemente en soledad; y que sepan que hay personas que les sucede, y que es normal.
Seguimos preguntando a adolescentes si les pasan estas cosas y muchas otras. A veces hay quienes se ríen y burlan del contenido de las preguntas, se extrañan de que alguien haga cosas tan raras o tenga pensamientos igual de raros. Se burlan y ríen porque desconocen que detrás de todo eso NO HAY RAREZA, SINO REALIDADES DOLOROSAS. Les advertimos con mucho énfasis: <<por favor, no hagas comentarios, burlas, ni te rías de las preguntas; si las preguntamos es porque suceden y no sabes si la persona que tienes al lado le pueda estar pasando>>. Este breve ejercicio de psicoeducación está basado en la EMPATÍA y en el RESPETO.
Los trastornos mentales, los síntomas psicológicos, son comunes en el ser humano, no son adquiridos ni mantenidos por voluntad, responden a una complejidad de causas interaccionadas y nada tienen que ver con la culpa. Nos empeñamos mucho en buscar el por qué y en encontrar "solución" para "quitar el trastorno", pero presten atención:
Necesitamos a más PERSONAS QUE ESCUCHEN MÁS Y JUZGUEN MENOS CUANDO HABLAMOS DE SALUD MENTAL.
Es un cambio que necesitamos como sociedad, y solo va a calar hondo en el imaginario colectivo CUANDO PROBLEMATICEMOS: cuando mantengamos una actitud crítica en el momento en que alguien hable en tono despectivo de los trastornos psicológicos, cuando no seamos condescendientes con quien se justifica en la ignorancia y no hace nada para informarse.
Vivimos en un mundo interconectado y la información está al alcance de nuestra mano con un 'Click'. Somos muchas las personas que DERRIBAMOS MUROS DE OCULTAMIENTO PARA PALIAR LA IGNORANCIA Y BURLA DE OTRAS PERSONAS, pero el cambio será posible no cuando hablemos/opinemos/juzguemos/demos nuestro parecer de las cosas, sino CUANDO ESCUCHEMOS A QUIEN QUIERE Y NECESITA HABLAR, A QUIEN HABLA EN PRIMERA PERSONA SOBRE SU REALIDAD.
En Psicología cuando evaluamos, como hacemos con las escalas de este artículo, nos centramos en conocer la realidad que tenemos delante, nos esforzamos para poder llegar a esa realidad que transmite la persona, la que está viviendo; trabajamos para mejorar la forma de preguntar; para que al final cualquier persona que lea una frase pueda saber que le estamos preguntando por eso que le sucede y que es tan difícil expresar con palabras.
Seguiremos preguntando y validando cuestionarios que nos ayuden a conocer qué nos sucede a los seres humanos y tender puentes de diálogo entre todxs. PORQUE SOLO CUANDO TIENES PALABRAS PUEDES HABLAR DE LO QUE TE PASA, Y CUANDO HABLAS EMPIEZAS A EXISTIR PARA EL MUNDO.
Mi sueño es que muchas personas puedan hablar libremente sobre lo que les sucede, que sean completamente quienes son.
Y por ello seguiré creando y compartiendo palabras para hablar de la Tricotilomanía.
Beatriz
columnista invitada
Hay acceso libre para leer el artículo completo hasta el 23 de diciembre. Les invito a que lean, se informen y compartan.
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